Orientación escolar y profesional
A lo largo del ciclo vital, los individuos experimentan fases de transición y cambio a nivel personal y laboral, que implican necesariamente una redefinición de su identidad.
Estos periodos de cambio suelen ir acompañados de dudas e incertidumbres y de una gran agitación interior.
El individuo lucha internamente por comprender «¿Quién eres?»; «¿Cuáles son tus intereses y aspiraciones?»; «¿Cuáles son tus puntos fuertes y débiles?»; «¿Cuáles son tus competencias y habilidades?»; ¿Qué oportunidades de formación y trabajo se adaptan mejor a tus características individuales?».
Este trabajo de exploración de la identidad comienza en la adolescencia, con las primeras elecciones inherentes a la transición de la educación primaria a la secundaria; y continúa en la edad adulta, con la transición a la educación universitaria y de ahí al mercado laboral.
El éxito de la consolidación de una identidad vocacional cohesionada y coherente depende en gran medida del trabajo de autoconocimiento que el individuo sea capaz de llevar a cabo a lo largo de su ciclo vital, y de su capacidad para explorar y recabar información del mundo exterior, en un intento de sintetizar permanentemente sus cualidades interiores con las oportunidades que le brindará la realidad.
El objetivo de las consultas de orientación vocacional y profesional es apoyar a los individuos en estos periodos de transición, ayudándoles a analizar aptitudes e intereses -aumentando su autoconocimiento-, así como dotándoles de las herramientas que les permitan dirigir de forma autónoma sus procesos de elección y toma de decisiones hacia compromisos vocacionales más satisfactorios y autosuficientes.
Este proceso comprenderá una serie de fases que van desde una entrevista clínica, pasando por la aplicación de pruebas destinadas a determinar las principales inclinaciones/tendencias vocacionales, hasta la devolución final de los resultados de la evaluación vocacional en formato de informe.